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Arquitectos: MBL architectes, bureau David Apheceix
- Área: 500 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Maxime Verret, Yann Stofer
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Proveedores: Béton Briard
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Desde 10 años, MBL architectes trabaja en la transformación progresiva de un antiguo molino industrial de Boissy-le-Châtel (Francia) en un espacio de arte contemporáneo para la Galleria Continua. Iniciado en 2013, el proyecto aspira a mantener y preservar el paisaje industrial ruinoso, típico del lugar. Los residuos de las construcciones derruidas, subrayados por la presencia de plantas hortícolas y el desarrollo de especies endémicas salvajes, se funden y crecen junto a la diversidad de edificios industriales.
El proyecto de "Skatepark Continua" es la continuación de una investigación realizada sobre los espacios producidos por las culturas del skate, que dio lugar a una publicación y a una exposición en Villa Noailles, en Hyères (Francia), en 2016. Esta investigación nos ayudó a comprender el poder estructurante que puede tener un skatepark en el desarrollo de un territorio. A diferencia de lo que se podría suponer de un equipamiento tan especializado, los skateparks provocan la reunión de una población diversa. Punto de encuentro de niños y adultos, terreno de juego para la práctica de todo tipo de deportes con ruedas y espacio para el entrenamiento más asiduo del skate, los skateparks construyen comunidades temporales, así como amistades duraderas. Su capacidad para generar una forma de "vida pública" hizo que la construcción del skatepark en este lugar fuera tan relevante. Atrajo a un nuevo público a las instalaciones de la galería, no necesariamente familiarizado con el arte contemporáneo, y ofreció un espacio de encuentro a los residentes cercanos.
La construcción del Skatepark Continua explora las posibilidades del concreto húmedo. En el sitio mismo, se ensamblaron y soldaron estructuras metálicas. El concreto fresco se proyectó directamente sobre el armado metálico, y después se estiró y alisó hasta conseguir las formas deseadas antes de que fraguara. Principalmente empírica, la fabricación del skatepark se debe en gran medida a la destreza de los albañiles encargados de darle forma. La obra se llevó a cabo a la manera de una performance que celebraba el encuentro de un proyecto y un sitio.
Al diseñar este proyecto, surgió el deseo de explorar la fluidez característica de los primeros skateparks de los años 70. En la época predigital, las formas encontradas o construidas de los primeros skateparks prefiguraban la geometría que la arquitectura paramétrica conseguiría modelar y popularizar a principios de nuestro siglo. El proyecto explora esta prehistoria, las premisas empíricas de una arquitectura no estándar.
Diseñado como una franja continua, evitando cualquier delimitación rígida, el skatepark pretende ser una estructura para el paisaje. Extendiéndose a lo largo de las antiguas vías férreas que atraviesan el polígono industrial, el skatepark está inmerso en árboles y arbustos. Conecta los edificios en este territorio distendido. Las líneas curvas de concreto crudo delinean sutilmente las formas de los tilos, los álamos, los abedules y las buddleias. Sin ninguna forma de preconcepción sobre su diseño, la forma del skatepark se adapta a las especificidades del terreno y de la vegetación existente.
